sabado 25 de enero de 1997, 365 días antes habia ido muy temprano a la cuarta zona de reclutamiento por segunda vez, convencido de que ese seria el ultimo dia en el ejercito, pero eso no fue lo que paso. por eso ese sabado despues de tantas tantas cosas estaria dando los ultimos pasos de orden cerrado, la ultima oración a la bandera, el ultimo baño en esas duchas.
A los soldados bachilleres en esa epoca les 'pagaban' uno 28mil pesos mensuales, pero el ultimo dia, el dia de la mocha, recibian unos 108mil, asi con las billeteras gordas y las hormonas acumuladisimas, nos encontramos unos diez exsoldaditos, con su libreta militar nueva afuera de una casa de lenocinio, mi soldado rios negocio el descuento de la entrada y el consumo minimo, primera vez ante una pista de baile con un tubo cromado en el centro, las meseras eran tambien bailarinas, el unico hombre trabajando era el barman, habia unas cinco personas cuando entramos, unas mesitas cojas, unas sillas metalicas mas bien incomodas, calculo que unas diez muchachas, tres en ese momento sirviendo las mesas, una bailando alguna cosa de aerosmith en la pista y seis que salian de vez en cuando de un cuartico del fondo, como verificando a la clientela de turno, una rubiecita desabrida, una morena alta y firme, una peliroja maciza, una tras otra se turnaban a intervalos de unos diez minutos en la pista, luego pasaban entre las mesas pidiendo la colaboración del publico, el soldado rios fue el primero en ir a una piecita con la morena alta, despues el soldado dimatte con la rubiecita, despues el soldado pérez con la peliroja (peliteñida), el consejo que circulo fue que no dieramos más de 40mil, que si podiamos nos guarapiaramos la ubre antes de entrar a la piecita, que no las invitaramos a tomar nada y que de ser posible usaramos dos condones, la piecita tenia el espacio casi justo para una cama doble y un baño con ducha, el soldado pérez estaba nervioso, hacia más de un año de la ultima vez que junto pelos, la peliroja se empeloto en un parpadeo, el siempre piensa que se ve ridiculo con las medias puestas luego de quitarse los pantalones, conversación minima, el soldado pérez se acosto casi temblando, como decia el manual la peliroja abrio el condon, se lo puso entre los labios y luego al soldado pérez, una mamada mediocre, escupirse los dedos mojarse y comerse al soldado pérez fue un solo movimiento, no hubo precalentamiento ni calentamiento ni imaginación, solo la reacción fisiologica esperada del soldado pérez, preguntar con sorna si ya habia terminado, entrar al baño y echarse agua en sus pelos negros, el soldado pérez pidio una segunda oportunidad, la peliroja pidio la misma cantidad, vestirse despacio, ponerse las medias y el resto, abrir la puerta y volver a la mesa, donde como todos lo demás hablo maravillas de sus cualidades como amante, igual que los demás pensando en lo ridiculo de lo que estaban haciendo. el soldado pérez penso que si no se hubiera gastado esa platica así, se hubiera podido comprar una muy buena calculadora, el soldado pérez es un nerd en rehabilitación.
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