martes, julio 18, 2006

los mareados

charlie fue profanado, alguna vez la ahora novia de mi primo g alcanzo a bajar la ventana y profano una puerta por fuera, g viendo un momento propicio para anotarse unos punticos g limpio como pudo con los restos de una cocacola dos litros, despues de profanar a charlie la ahora novia de g intento darle unos picos, pero g habilmente los esquivo, al dia siguiente me toco a mi con agua y jabon limpiar el resto.

el viernes despues de la jornada normal de trabajo nos quedamos en la oficina, salimos al balconcito con vista a la avenida y procedimos a tomarnos veinticuatro cervezas, una botella de ron Medellín, una botella de tequila 1800 y en medio del desespero y por seguir esa estupida leyenda urbana que dice que es mejor no mezclar alcoholes, seguimos con tres botellas de destapa caños amarillo marca jose cuervo, al terminarse la cosa amarilla esa y viendo que llovia y que además ya eran cerca de las dos de la mañana, me parecio apenas justo llevar la gente que quedaba a su casita, ERRROR, debi evitarlo cuando una compañera de trabajo al ver que los ascensores estaban apagados dijo que no iba a ser capaz de bajar por las escaleras que estaba muy mareada y de pronto profanaba las escaleras, la siguiente señal ocurrio cuando fui a recogerlos a la entrada del edificio y la misma compañera no aparecia, siguio bajando escaleras y llego al sotano, monte la gentecita a charlie, a veinte por hora por la avenida rumbo a envigado a descargar el mas cercano, no iba a esa velocidad por precaución, sino porque la mareada no soportaba mayores velocidades y cualquier cambio repentino en la aceleracion empeoraba su condición. luego de descargar el primero la mareada hundio su cabeza en lo más profundo de sus rodillas, me alcance a alegrar creyendola muerta ó por lo menos desmayada, acelere y a los trescientos metros la temida reacción, frenar en seco, abrir la puerta y no mirar, esperar que todo hubiera caido afuera, la ilusión duro poco, el compañero que la tenia al lado mostraba con asco sus pantalones humedos y algunas partes cubiertas de algo blanco que no quiero saber que era, la mareada luego de esto recupero su animo, repetia sin cesar que nunca se habia emborrachado y que estaba muerta de la pena, el compañero profanado aprovecho el agua que habia caido toda la noche y como pudo limpio su triste humanidad, despues del incidente no tuve más reparos en andar rápido, ya solo queria deshacerme de esa caterva de mareados.
al dia siguiente quite los cojines de atras y con agua y jabon de coco luche contra los peores restos del incidente, ahora será comprarle ambientador de fresa a charlie

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