Esta imagen me ha acompañado por muchos años, de hecho vivo en estas mismas coordenadas hace veintiocho años, la vista del cerro volador, de la universidad de antioquia, de la nacional, del planetario, del jardín botánico, del estadio, de la iglesia gotica mas bonita de medellín, todas estas imágenes la próxima semana serán reemplazadas por la vista desde un séptimo piso, en otro sector completamente diferente de la ciudad, donde ya no veré las luces de la ciudad intentando alcanzarme como tentáculos, tantas tantísimas noches en la terraza de mi casa, viendo la ciudad respirar, oyendo alguna emisión extraña en onda corta, tomando cerveza y reconociendo cada calle visible, y ahora?, ahora ya no es aquí.
Los cambios son duros y rudos, pero creo que es justo en ese acostumbrarse a nuevas rutinas, rutas de autobus, paradas de metro y tienditas donde comprar el mercado que se encuentra esa felicidad que traen las nuevas aventuras.
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