...el martes, volvimos a desayunar en la polita, los mismos viejos tertuliando, los mismos cuadros colgando, el mismo desayuno, la misma buena conversacion, la misma cara de felicidad.

el encuentro con el parapente estaba programado para la una de la tarde, muy ordenados pagamos el hotel y el rafting y las cuevas y el parapente, nos despedimos de samuel el recepcionista que nos ayudo consiguiendo los precios y los 'descuentos', a la una en la entrada al gallineral nos debiamos encontrar con el parapentista, pero nunca llego, los de la agencia nos empacaron un miniguia que nos mostraría el camino primero hasta curiti y despues hasta el voladero, charlie mostro su temple subiendo en terreno destapado y nos llevo hasta la punta de la montaña donde estaban cuatro paisas (muy casposos) y fredy el parapentista que me iba a poner a volar, pregunto el peso y me dijo que dependiendo de las condiciones era mi turno de despegue, me dio sustico porque habia nubes negras y muy poco viento, llamo a uno de los paisas, que en un ataque de hombria se nego a ponerse el casco, solo porque era rosado y quedaba muy galleta (sic), el vergajo ese estuvo con suerte porque unas nubes no dejaban volver a tierra y estuvo volando como media hora, despues de aterrizar me miro y me dijo sin duda, vos seguis. naty toda la mañana me estuvo preguntando si estaba nervioso, pero la verdad estuve siempre calmado, el casco, la explicación para sentarme una vez en el aire y mas na', y sin pensarlo ni temerlo me eleve, estaba volando, viendo como el suelo se alejaba y las corrientes nos llevaban, no senti vertigo, aunque el aire me daba en la cara y veia aire para cualquier lado que mirara, vole alto, vole lejos, vole en barrena e hice 'sapitos', todo como por veinte minutos, para aterrizar solo tuve que levantar las piernas y estirarlas, cai sentado, sonriente y con el estomago dando saltos todavia, no nos ibamos a quedar a ver a los otros paisas volando entonces de vuelta en charlie y otra vez a curiti, en una esquina del parque naty compro unos tapetes en fique hermosos por menos de veinte mil, no quisimos tomar riesgos y preferimos volver a sangil y comer algo bueno antes de seguir hacia bucaramanga, dejamos al miniguia muy cerca de sangil y comimos muy mucho.

el camino a bucaramanga es bonito, por lo menos hasta que uno se encuentra de frente el cañon del chicamocha, no es es que se vean unos precipicios tetricos, pero la montaña que se ve es impresionante, es como la montaña donde esta la ciudad blanca, una montaña oscura, siniestra, surcada por rios grises y turbios, el rio chicamocha se ve en el fondo oscuro y gris, es bastante sobrecogedor, descendimos el cañon y comenzo una llovizna fastidiosa que no limpiaba sino que ensuciaba, en una carretera oscura y llena de camiones imposibles de pasar, llegamos a piedecuesta antes de las ocho de la noche, sin saber donde carajos estabamos, pero por lo menos ahora habian dos carriles y una via iluminada. ibamos para la casa de una tia de naty y solo teniamos la dirección, siguiendo la via principal nos dimos cuenta que no ibamos a llegar empezando con el detalle que no sabiamos si estabamos en una calle ó en una carrera, por ahi le preguntamos a tres taxistas, los cuales invariablemente median las distancias en semaforos y giros a la derecha ó a la izquierda, naty ya se iba desesperando, cuando llegue solito hasta la dirección indicada, el tio de naty es un man digamos que interesante, fue guerrilero y ahora es uribista, es medio yerbatero, hace yoga y tiene un maestro indio sikh que ya los ha visitado, nos hablo de los mundos fisicos y espirituales de digitopuntura, de reencarnacion, de las orbitas microcosmicas y otras cosas, mientras tanto la abuela de naty que tiene alzheimer y parece despistada le hacia las preguntas más sensatas y complicadas. yo dormi en la cama de la prima y naty en un sofa cama en la sala, no senti mucho calor y los zancudos respetaron mi humanidad.